En esta entrevista a Eva Tobajas, psicooncóloga del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y miembro del grupo de psicooncología de la Sociedad Catalana-Balear de Oncología, abordamos cómo se siente el niño o adolescente que ha pasado un cáncer infantil y vuelve al colegio, cómo se le puede ayudar y la función de los profesores para que se integre bien en la escuela.
Para facilitar la reincorporación es importante haber hecho un buen trabajo ya desde el diagnóstico respecto a informar a la clase de lo que está pasando, manteniendo la conexión del niño con el grupo a pesar de la distancia.
Es importante que el tutor conozca el estado físico y psicológico del niño en el momento que vuelve, poder saber que jornada hará, posibles secuelas, actividades… También el resto de profesores deberán estar al corriente. En general cualquier información relevante para su adaptación y que los padres consientan dar; hay que preservar también su intimidad.
Al volver a la escuela también se prepara a los alumnos para que respeten sobre que quiere o no quiere explicar.
En los casos de que existan secuelas a nivel cognitivo, dificultades de atención, comprensión etc… debido a los tratamientos o las secuelas propias de la enfermedad, se deberá realizar una adaptación curricular como cualquier niño con necesidades educativas especiales.
De cara al profesor es importante que le proporcione apoyo positivo pero evitando actitudes sobreprotectoras. Siempre que no haya dificultades se le debe exigir el mismo rendimiento que a los demás, para ayudarle a ganar autonomía y confianza
